La maquina, mi compañera

Bueno poco a poco esta llegando el contador al día H.
La verdad que ya tengo muchas ganas de iniciar esta aventura personal y que en parte todos los que me sigáis disfrutéis también de mis explicaciones que día a día iré colgado, si dispongo internet.
La documentación para obtener el visado ya esta presentada y el próximo día 24 de julio tengo que ir a recogerlo ya.
Las nuevas alforjas, ya están nerviosas en mi trastero para recorrer kilómetros y kilómetros.
Pero la pieza clave de este viaje a parte de las piernas y la salud, es mi compañera inseparable de ruta... la bicicleta.
Esta vez, también finalmente dejo a la Marin en casa y me lanzo con una moderna BH, esta vez apuesto por el producto nacional. La verdad que no tenía previsto adquirir ninguna bicicleta, pero una tarde hablando con Paco Galvez sobre esta ruta, me convenció de esta ¨monada¨ de dos ruedas. Mira que Paco no tiene dotes de comercial, pero vi una buena ocasión y no ha sido un gran desembolso.
Es una bicicleta de segunda mano, con cuadro de aluminio y acero. Con un sistema reducido de amortiguación delantera, que para mí ruta no es nada importante. Tiene un peso en vacío de unos 12 kilos. Y como novedad dispone de sistema de reducción de velocidad por discos con pistones hidráulicos. Este apartado es vital, pues ahora para frenar mi peso, me tengo que pasar a las fuerzas y leyes hidráulicas.
Como también podéis observar, como accesorio tunning, le he acoplado el manillar que ara que los mirones Europeos queden atónitos a mi paso.
Bien, espero que la semana que viene, pueda explicar si finalmente tengo ya mi visado.